Hay algo profundamente poético en que, mientras algunos aun repiten con nostalgia «de esto no se puede vivir», la industria musical global haya crecido por décimo ano consecutive, alcanzando los US$29.6 mil millones en ingresos en 2024 (IFPI, 2025). Si, leyó bien, diez años seguidos creciendo. No estamos hablando de rumores, estamos hablando de dates y hay que darlos; y emocionarnos por haber elegido este camino en medic de tantas críticas y complicaciones.
El Global Music Report 2025 no solo confirma que la musica sigue siendo un buen negocio, sino que nos ratifica que es el negocio. Con un crecimiento global del 4.8% y un streaming que representa ya el 69% de los ingresos de la industria (IFPI, 2025), esta claro que quien no este montado en esta ola, se esta ahogando en excusas.
Aquí es donde Latinoamérica brilla como nunca con un incremento de mas del 22.5% de crecimiento en 2024, siendo una de las regiones con mayor dinamismo global, superada solo por MENA y Africa Subsahariana (IFPI, 2025). Eso sin dejar de lado que Mexico ya es el décimo mercado mas importante del mundo, desplazando a Australia (IFPI, 2025). Recuerdan cuando nos decían que los latinos no éramos «mainstream»? Bueno, resulta que ahora somos los protagonistas del stream.
Ahora bien, el desarrollo empresarial en esta industria no es un lujo ni una coincidencia es un deber. El informe lo deja claro entre líneas, el crecimiento sostenido de la musica no depende solo del talento, sino de la capacidad de los artistas para crecer en vision global, uso estratégico de tecnología, pensamiento comercial y marketing inteligente (IFPI, 2025). Pero ojo, nadie crece solo esa vision integral no la da una playlist, la da un buen equipo. Es lo que debe ofrecer tu disquera, tu editora, tu management, tu equipo … En otras palabras el equipo que elijas sera la tripulación del barco que dirige tu sueno. Y ese barco, amigo lector, tiene que flotar y llegar lejos.
Ejemplos sobran. Desde Myke Towers, quien se convirtió en un fenómeno global desde Puerto Rico gracias a su alianza con Warner Music (IFPI, 2025), hasta los nuevos escenarios donde convergen creatividad e innovación, como los conciertos virtuales en Fortnite, que permiten a artistas como Myles Smith crear experiencias inmersivas sin importar el país de origen (IFPI, 2025). Todo esto está respaldado por una estructura. Porque sí: talento sin estructura es como un salpicón sin frutas (chiste colombiano).
La música es el negocio más poderoso del 2025: Mueve culturas, economías, y millones… Pero solo para quienes la entienden como empresa.
¿Y qué hay de la inteligencia artificial? El Global Music Report 2025 advierte que, mientras la IA puede mejorar la experiencia del fan o restaurar voces icónicas, su uso indebido —como el entrenamiento de modelos con música protegida sin autorización— amenaza directamente la creatividad humana (IFPI, 2025). Por eso, dedicarnos a los artistas hoy en día significa algo más: protegemos la humanidad creativa que hace posible que el arte siga siendo arte, y no solo un producto más, generado en masa por una máquina sin alma.
Así que, si eres artista y estás mirando el panorama con miedo, con hambre o con ambas cosas (que suele pasar), recuerda esto: estamos viviendo el mejor momento para ser músico. El mercado está creciendo, las puertas están abiertas y el mundo está listo para escuchar tu historia. Pero no basta con subir canciones: es necesario formarse, tener un equipo y fijar la mirada en un rumbo, antes de lanzar tu barco al mar, no a la deriva. Porque hoy, más que nunca, la música es un excelente negocio. Pero es necesario hacerse al Derecho.